El desempleado o parado es un perfil de potencial emprendedor propenso a cometer muchos errores al iniciar una actividad empresarial.
Su situación puede estar marcada por la necesidad de tener ingresos y no encontrar un trabajo por cuenta ajena que se los facilite. Fuera del mercado laboral, con oportunidades limitadas, muchos optan por el autoempleo, se hacen autónomos y emprenden.
Repasemos los principales errores que comete un parado al emprender:
Falta de esfuerzo y talento
A lo mejor no se es consciente del esfuerzo que a un emprendedor de éxito le cuesta serlo. Emprender es un esfuerzo continuado y de sacrificios constantes.
Además, debes contar con talento que aportar a la cadena de valor del negocio que pongas en marcha. Si no tienes nada que aportar en talento y esfuerzo – tener una sola de ellas no vale – no emprendas.
Mentalidad pasiva
Si se emprende por primera vez o se hace habiendo trabajado para otras personas mucho tiempo, a lo mejor descubres que el emprendimiento no es para ti.
Un error común es no desprenderse de la mentalidad de empleado, esperando que alguien te resuelva ciertos problemas, la responsabilidad y consecuencias que conllevan las decisiones tomadas en el día a día o pensar que el dinero llegará sin hacer nada. La comodidad y el emprendimiento suelen estar reñidas.
No disfrutar
Si se va a crear un negocio debe ser alguna actividad que te motive. Debe ser algo que te guste hacer realmente, que haga que, aunque las cosas no vayan bien dadas por lo menos te quede la pasión por trabajar en algo que te deje satisfecho.
Odiar el riesgo
Desde que se decide emprender se entra en una espiral de tener que manejar el riesgo constante al que se está sometido.
Si tienes problemas en esas situaciones, o no va contigo eso de arriesgar tu tiempo, tu dinero o directamente tu vida, no te metas, porque te terminará venciendo.
Manejar dinero
Tienes que saberte manejar con dinero. Debes saber, por un lado, analizar correctamente cómo realizar las inversiones, y por otro, administrar correctamente el dinero que va a pasar delante de ti, que en gran medida será un flujo que no será tuyo sino para pagar a proveedores, impuestos o la Seguridad Social.
Foto: Pixabay.com/Pexels